El Camping Musical albergará el VIII Encuentro Juvenil de Música de Cámara que incluye clases grupales, charlas, talleres, actividades didácticas interdisciplinarias y conciertos, a desarrollarse entre hoy miércoles y el domingo próximo.
Organizado por la Fundación Cofradía, cuenta con la participación de Osvaldo Vázquez, Adrián Porcel de Peralta, Jorge Caldelari, Javier Mas y Héctor Bisso, entre los profesionales con amplia experiencia docente convocados para enriquecer la formación de jóvenes estudiantes en el marco de una propuesta integradora.
El público tendrá oportunidad de acceder a conciertos en la sala Rautenstrauch –Vivaldi 1000, Llao Llao- hoy miércoles y el sábado a las 20.30. Ambos con acceso libre, sugiriéndose una contribución voluntaria de 150 pesos.
En la Iglesia Catedral Nuestra Señora del Nahuel Huapi, el viernes y el domingo desde el mismo horario.
El primero incluirá obras de Frédéric Chopin y Antonín Dvorak interpretadas por Tomás Altmann (cello), Jorge Caldelari (violín) y Bárbara Warzica (piano).
El programa del domingo está integrado por creaciones de Claude Debussy, Robert Schumann y Felix Mendelssohn a cargo de Caldelari (violín), Altmann (cello) y Javier Mas (piano).
Participantes del Encuentro por tercera temporada consecutiva, Caldelari (violinista de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires con sede en el Teatro Colón) y Mas (trompetista en esa agrupación orquestal, director invitado en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón y pianista) forman parte del plantel de profesores que durante cinco jornadas compartirá conocimientos con jóvenes y talentosos músicos de la región -Villa La Angostura, El Bolsón, San Martín de los Andes y esta ciudad-.
Desde 2016 como dúo, abordan repertorio ecléctico con la intención de difundir obras poco transitadas representativas de lenguajes, estilos y épocas diversas, con especial interés por creaciones de compositores argentinos.
Participaron de la serie «Música Explicada» en la Usina del Arte, durante dos años del ciclo «Música al mediodía» en el Salón de Honor del Centro Cultural Kirchner y ofrecieron conciertos en el Museo Isaac Fernández Blanco, Centro Cultural La Kalimba (Escobar), Foro de las Ciencias y las Artes (Vicente López), ciclo de Música de Cámara en el Olivos Tennis Club (Olivos), entre otros escenarios. Recientemente brindaron interpretaciones durante el acto de clausura XVIII Festival Internacional de Música Clásica por los Caminos del Vino 2018 en Mendoza.
Jorge Caldelari, senda iniciada en Cofradía
Tomado el contacto con la música a los 9 años en el Camping Musical Bariloche, el nexo con el violín fue evidente al escuchar la variedad de sonidos y belleza desplegadas por alumnos de Kyoko Kurokawa. Integrado a las clases, surgió Cofradía (1995) donde “todo era una fiesta, horas de ensayos con amigos y nuestros profesores Kyoko y Diego (Díaz) preparando el repertorio. Las primeras giras a Villa La Angostura y Las Grutas fueron grandes sucesos. Ya teníamos la primera orquesta juvenil en Bariloche”, refería el barilochense durante una de las visitas a esta ciudad.
En Buenos Aires aguardaban el Teatro Colón, conciertos casi diarios, universidades y conservatorios, profesores, orquestas sinfónicas juveniles y “chicos de todo el país persiguiendo el mismo sueño: ser mejores músicos. Como siempre, hay un tiempo de adaptación para entender que uno tiene que luchar y esforzarse mucho si quiere conseguir algo”, afirmaba.
Becado, estudió Licenciatura en Composición Musical en la Universidad Católica y violín con el maestro Ernesto Biruk. Fue primer violín de las orquestas juveniles Libertador San Martín, de Cámara del Congreso de la Nación y la Académica del Teatro Colón, con la que realizó su primera gira europea y acompañó a solistas como Martha Argerich y Alberto Lysy, con quien tomó masterclasses.
Con apoyo del Mozarteum Argentino y el Fondo Nacional de las Artes, participó de los festivales de Salzburgo, Bayreuth, Londres y Berlín. Durante cinco años tomó clases con la solista internacional Chee Yun Kim en la Southern Methodist University de Dallas (Texas), estadía que fructificó también en la creación del Dallas String Quartet, ensamble que encaró una combinación entre lo clásico, el pop y el rock a través de violines, violas y cellos eléctricos.
Compositor, estrenó un Cuarteto de Cuerdas en el Centro Cultural Recoleta y en 2014 participó en la creación musical y arreglos de la obra «Farinelli, el castrado», estrenada en el Teatro Empire.
Como músico “uno siempre trata de tomarse pequeñas libertades interpretativas respetando los estilos. Cambio de volúmenes, de velocidades, agregar alguna pequeña nota, cambiar la forma de decir una frase. Creo que nada es para siempre y que la música es transformación”, definía.